Espíritu de verdad
Salmo 26 (25)
Señor, hazme justicia,
pues mi vida no tiene tacha.
En ti, Señor, confío firmemente;
examíname, ¡ponme a prueba!,
¡pon a prueba mis pensamientos
y mis sentimientos más profundos!
Yo tengo presente tu amor
y te he sido fiel;
jamás conviví con los mentirosos
ni me junté con los hipócritas.
Odio las reuniones de los malvados;
¡jamás conviví con los perversos!
Lavadas ya mis manos y limpias de pecado,
quiero, Señor, acercarme a tu altar,
entonar cantos de alabanza
y proclamar tus maravillas.
Yo amo, Señor, el templo donde vives,
el lugar donde reside tu gloria.
No me quites la vida junto con los pecadores;
no me hagas correr la suerte de los asesinos,
de esos que tienen las manos
llenas de maldad y soborno.
Pero mi vida es intachable;
¡sálvame, ten compasión de mí!
Mis pies pisan terreno firme;
¡bendeciré al Señor en presencia de su pueblo!
Texto para la oración
(Jn 1, 45-51 )
Felipe fue a buscar a Natanael y le dijo:
–Hemos encontrado a aquel de quien escribió Moisés en los libros de la ley, y de quien también escribieron los profetas. Es Jesús, el hijo de José, el de Nazaret.
Preguntó Natanael:
–¿Acaso puede salir algo bueno de Nazaret?j
Felipe le contestó:
–Ven y compruébalo.
Cuando Jesús vio acercarse a Natanael, dijo:
–Aquí viene un verdadero israelita, en quien no hay engaño.
Natanael le preguntó:
–¿De qué me conoces?
Jesús le respondió:
–Te vi antes que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera.k
Natanael le dijo:
–Maestro, ¡tú eres el Hijo de Dios,l tú eres el Rey de Israel!m
Jesús le contestó:
–¿Me crees solamente por haberte dicho que te vi debajo de la higuera? ¡Pues cosas más grandes que estas verás!
Y añadió:
–Os aseguro que veréis el cielo abierto, y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre.
Reflexión
– Hay dos formas de vivir:
- Buscando seguridad, buscando respuestas ciertas que me hagan sentir seguridad en la vida, que me aseguren lo que tengo que pensar o cómo tengo que actuar en la vida… En definitiva, tener controlada mi vida.
- O vivir buscando verdad antes que seguridad. Si busco la verdad de la vida, estoy dispuesto a asumir el riesgo de equivocarme, con tal de que viva sintiendo el fuego de la verdad en mis entrañas. Prefiero vivir la libertad que me hace crecer por dentro.
– ¿Qué significa vivir en la verdad? La verdad tiene que ver con jugar limpio consigo mismo, con la intuición –no siempre clara– de que puedo vivir de otra manera, de que tengo que salir a la intemperie, a la realidad de la vida, de que tengo que dejar que la experiencia religiosa me transforme por dentro y me libere.
– Cuando hablamos de espíritu de verdad, no estamos hablando de que cada uno viva «su» verdad, según le convenga. El espíritu de verdad se da cuando has descubierto al Dios vivo, o has descubierto tu propia dignidad de persona.
– El salmo 26 (25) que tienes al comienzo, pone en contraposición a los buenos y a los malos, como muchas veces en los salmos. Pero esa contraposición no es por situarse por encima de los demás, como parte de un grupo de élite. No se trata tampoco de una bondad moral de comportamiento ante las leyes. Se trata, más bien, de la decisión interior de ser íntegro, honrado consigo mismo, con la verdad de la propia conciencia y ser fiel con Dios.
– Lee tranquilamente el texto de Jn 1, 45-51 (tienes más arriba). Este Natanael del texto se nos hace cercano. Busca apasionadamente. Hace preguntas, no para huir o escaquearse de la verdad o protegerse del compromiso, sino por espíritu de verdad. Se deja iluminar. Y cuando encuentra lo que buscaba, se entrega sin reservas ni condiciones. Y Jesús aparece desarmado ante una persona así, con este espíritu de verdad.
– Cuando uno busca la verdad o anda en verdad, no controla, no tiene miedo a verse desprotegido. A la verdad se le nota en que te hace libre, te da alas para volar, aunque haya que dejar crecer esas alas antes de echar ansiosamente a volar.
– Y comienzas a intuir quién es Dios de verdad.
***
Preguntas para hacer trabajo interior:
- ¿Qué buscas en la vida, seguridad o verdad?
- ¿Estás dispuesto a que la verdad te comprometa en tu vida o en tus caminos?
- ¿O prefieres vivir según tus planes y proyectos, sin que nadie se te imponga?
- ¿Te sientes honrado contigo mismo, con tu conciencia?
- ¿O procuras no reflexionar mucho, no sea que sientas cosas raras?
- ¿Te conformas con ser como los demás o buscas ser «tú mismo»?
Canciones
1) Jauna, ez nekien zu nor zinen
Señor, no sabía quién eras (Traducción)
(Traducción del texto en euskera)
Señor, no sabía quién eras,
ni quién eras, ni que existías;
sin embargo, yo te buscaba,
no encontraba descanso.
Era aquel ciego del camino,
mendigo de migajas de felicidad;
pasaste junto a mí,
dador de pan caliente.
Mi noche te gritó,
todo era oscuridad, todo tropiezo;
tú me abrazaste en la luz,
me encontré, Señor, contigo.
Ahora ya sé quién eres, Señor,
quién eres tú y quién soy yo;
lo que mi corazón necesitaba
¡ay!, era tu amor.
Hoy estoy tan débil como antes,
soy así, soy débil, soy niño;
pero, Señor, todo lo puedo,
en el regazo gozoso de tus brazos.
Gracias, alabanza, amor,
dulce Señor de mi corazón;
a mi impotencia le nace gozo,
¡Tú, Señor, eres mi canto!
2) Eder da
Es hermoso (Traducción)
(Traducción del texto en euskera)
Es hermoso alabar al Señor,
dejar la vida en el Señor,
dejar en él la confianza
y la fe.
¡Lo demás es vacío!
Es hermoso acogerse al Señor,
aligerar las preocupaciones en él,
caminar en él
y vivir en él,
morir en el Señor!
Es hermoso ser cristiano,
poder llamar «Padre» a Dios,
se ha roto la cadena,
el Señor es la paz,
¡el Señor es el bien pleno!
Es hermoso, hermoso, Dios mismo,
acercaos a él,
venid a su perdón,
es tan compasivo.
¡Somos dichosos!
Poema de (Javier Garrido)
Creo que soy sincero, Señor,
y que quiero la verdad.
Pero Tú sabes mejor que nadie
la capacidad que tenemos de engañarnos.
Dame tu espíritu de verdad.
Desmóntame, Dios mío, si es necesario.
Libérame de mis falsas seguridades.
Hazlo, Señor, hazlo.